Búsqueda

Noviembre es el Mes Nacional del Cuidador

National Caregiver Month
La comunidad de trastornos hemorrágicos está formada por cuidadores dedicados. Las mamás, los papás, los abuelos, las parejas, los cónyuges y los amigos desempeñan un papel de apoyo crucial en el bienestar de sus seres queridos. Sin embargo, los cuidadores a menudo pueden sentirse estresados, abrumados y agotados. Por lo tanto, es importante que los cuidadores recuerden tomarse tiempo sólo para ellos. Los cuidadores suelen sentirse culpables o egoístas por prestar atención a sus propias necesidades. Pero a pesar de estos sentimientos comunes, priorizar un poco de tiempo para usted cada día puede ser de gran ayuda para controlar el estrés, lo que le preparará mejor para cuidar de sí mismo y de los demás.

*En 2013, alrededor de 271 TP3T de la población adulta en los EE. UU. brindaron atención a un familiar o amigo discapacitado o con una enfermedad crónica. Según los datos del censo actual, eso se traduce en más de 50 millones de personas.

Consejos rápidos y recordatorios para que los cuidadores practiquen el autocuidado:

  • Mueve tu cuerpo. Sal a caminar, estírate, corre, baila, practica yoga, practica algún deporte. Haz lo que te gusta hacer para poner tu cuerpo en movimiento.

  • Aprende a decir no.' Si agregar algo más a su plato ya ocupado le provocará más estrés, aprenda que está bien decir "no". Eres una sola persona, no puedes hacerlo todo.

  • Comer bien. Los cuidadores a menudo se concentran tanto en asegurarse de que todos los demás estén alimentados y coman de manera nutritiva que a menudo se olvidan de sí mismos. Coma una comida balanceada y tómese el tiempo para disfrutar comiendo en lugar de engullirla entre tareas.

  • Prioriza el 'tiempo para mí'. Tómate un poco de tiempo para ti cada día. Lee un libro, medita o participa en una oración o práctica espiritual si eso te reconforta, escribe en un diario o escucha música. Incluso si solo tienes 5 minutos libres al día, haz algo solo por ti.

  • Perdónate. Cuando las cosas no salen como esperamos o planeamos, a menudo nos culpamos a nosotros mismos. Tómate un momento para reconocer estos sentimientos, pero luego libéralos. Ninguno de ellos es perfecto.

  • Recuérdate a ti mismo lo positivo. Tómate un tiempo cada día para recordar los aspectos positivos de tu vida, como la familia, los amigos o cualquier otra cosa que te haga sentir feliz. Mantén esto en mente.

  • Pedir ayuda. Hable con familiares y amigos de confianza cuando necesite ayuda o simplemente necesite que alguien le escuche. No te avergüences si crees que podrías necesitar hablar con un profesional como un psicólogo o un trabajador social. Cuidar tu salud mental es tan importante como acudir al médico para un chequeo físico.

 

es_PREspañol de Puerto Rico