Factor de ajuste: la importancia de una dieta integral

Para muchos de nosotros, nuestra dieta pasa a un segundo plano cuando nuestras vidas se vuelven ocupadas y estresantes. Esto nos lleva a consumir más comidas procesadas y refrigerios mientras viajamos. Si bien estos alimentos pueden ser baratos y convenientes, también se les ha despojado de parte de su valor nutricional. Los productos integrales en lugar de los alimentos refinados (o procesados) son significativamente mejores para el cuerpo. Los cereales integrales tienen diecisiete vitaminas y minerales que se encuentran naturalmente en el grano integral, mientras que los cereales refinados solo tienen cinco, que se vuelven a agregar durante la fabricación. Cambiar su dieta hacia más cereales integrales puede ser económico y también puede agregar más variedad a sus comidas.
¿Por qué los cereales integrales son tan buenos para la salud? Los cereales integrales pueden ayudarle a mantener un peso saludable porque tardan más en digerirse y, por lo tanto, lo mantienen saciado por más tiempo. Tomar un desayuno y un almuerzo con cereales integrales evitará que comas bocadillos más tarde durante el día. Para las personas que padecen un trastorno hemorrágico, mantener un peso saludable es aún más beneficioso ya que alivia la presión sobre las articulaciones. Además, el alto contenido de fibra que se encuentra en los cereales integrales ayuda con la digestión. Previene el estreñimiento y por tanto el cuerpo se limpia de residuos de forma natural. Los estudios han demostrado que una dieta rica en fibra reduce los niveles de colesterol en el cuerpo.
¡Llevar una dieta rica en cereales integrales puede ser barato y fácil! Aquí hay algunas sugerencias para introducir más cereales integrales en su dieta:

• Sustituye los alimentos procesados por productos integrales. Las opciones de cereales integrales están fácilmente disponibles para casi todos nuestros alimentos básicos, como arroz integral y pasta, pan, tortillas y cereales integrales. Hay muchas variedades para elegir, especialmente en el caso del pan y los productos de cereales.
• Tenga en cuenta que los cereales integrales tardan más en cocinarse. Remojar primero el arroz integral u otros cereales reducirá el tiempo de cocción.
• Agregue variedad a sus comidas experimentando con diferentes cereales integrales. Puede encontrar una variedad en el pasillo de alimentos a granel de su supermercado. Para mantenerlos frescos, guarde los cereales integrales en el refrigerador.
• Debido a que el empaque puede resultar confuso, verifique los ingredientes en la etiqueta para asegurarse de que aparezca "grano integral o trigo integral" (asegúrese de que esté en la parte superior, ya que están enumerados en orden de cantidad). Por ejemplo, si incluye harina de trigo, no necesariamente es trigo integral.
• Dado que la mayoría de las comidas saludables requieren al menos un poco de tiempo para prepararse, considere preparar “lotes” grandes a la vez para poder comerlos en varias comidas a lo largo de la semana. Mueva las sobras del refrigerador al congelador después de 3 a 4 días.
• Mezcle avena con productos horneados, como galletas, muffins y bollos, para hacerlos más nutritivos.

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